Reserva directa, sin intermediarios
Avanzar sigilosamente y en silencio por el fiordo de Castro en estas ágiles embarcaciones y a nivel de mar produce una singular sensación, ver la altura de la ciudad, observar las variadas tonalidades de verdes y las grandes extensiones de praderas donde pastorean las ovejas, desde el mar se divisan las distintas construcciones de las granjas con sus pintorescos fogones y casas, ver los palafitos que emergen del mar, apaciguan al más indómito aventurero.
Caminaremos hasta el muelle del hotel y después de una charla de seguridad e inducción a la actividad remaremos hacia el norte del fiordo, donde se avistan distintas especies de aves como el Cisne de Cuello Negro, Zarapito de Pico Recto y Martín Pescador, Lobos de Mar podrán acompañarnos en parte de nuestra ruta y con un poco de suerte podremos ver Delfines Chilenos y si la época del año lo permite, Flamencos, cruzaremos hasta el sector de la playa de Ten-Ten, para seguir la hasta los palafitos de la calle Pedro Montt, haremos una parada para descansar y compartir un snack mirando la ciudad. Finalmente, volveremos hasta el muelle para retornar al hotel.